Resonancias.

Ella se mueve tan eficientemente. Sus movimientos transmiten seguridad. Presiente que su gran oportunidad se aproxima.

Luz artificial inunda pasillos y oficinas. El suelo encerado refleja sombras deformes. No alcanza a reconocer su rostro. Al despegar la vista, se encuentra con caras pálidas, ojos ahogados en profundas ojeras, sonrisas muertas… Personas ahora parpadeantes. Asustada vuelve a mirar el suelo. El compás nocturno es marcado por el incansable goteo de una máquina de café. Dedos que parecen arañas tejen su nuevo hogar en teclados de ordenador.

Ella cierra los ojos y respira profundamente. Desea que la gran oportunidad llegue brillante a su rescate. Una oportunidad ahora parpadeante.